Apodado "El Grande" o "El rey planeta".
No quiso gobernar y delegó los asuntos de estado en el Conde Duque de Olivares.
Era adicto al sexo y tuvo aproximadamente 46 hijos, de los cuales 12 fueron dentro del matrimonio (muriendo la mayoría a temprana edad).
No hacía distinciones entre mujeres y tuvo amoríos con solteras, casadas, viudas, doncellas, nobles, prostitutas, monjas, actrices..
Cansado de asistir de incógnito a los espectáculos de la Plaza Mayor, mandó construir un balcón.
Su romance con la actriz María Inés Calderón "La Calderona" fue un gran escandalo social y tuvieron un hijo: Juan José de Austria.
A Felipe IV le gustaba que le llamasen “el Grande” y tras la pérdida de Portugal, el Duque de Medinaceli le dijo:
"A Su Majestad le pasa como a los hoyos, que cuanta más tierra pierden, más grandes son".
"A Su Majestad le pasa como a los hoyos, que cuanta más tierra pierden, más grandes son".
Su matrimonio con Mariana de Austria quedó inmortalizado por Velázquez, en el cuadro de "Las Meninas".
En sus últimos años, cuando los médicos veían peligrar su vida, avisaban a los capellanes de la corte, para meter la momia de San Isidro en su cama, creyendo que le devolvía la salud.